🔔ANCIANOS REJUVENECEN TRAS COMER UNA MANZANA DORADA / Anime Resumen
Shusu siempre había sido un anciano común, cansado, sin gracia, con más arrugas que energía. Lo único que subía en su vida era la presión arterial. Pero todo cambia el día en que él y su esposa Ine prueban una manzana dorada y de la nada recuperan su juventud. Como si el tiempo retrocediera, ambos deciden revivir sus días de pasión con ganas de romper más que solo la rutina. Todo comenzó en su huerto. Mientras caminaban entre manzanos, Shuzu le preguntó a Ine qué haría si pudieran volver a ser jóvenes. Ella, Serena, respondió que lo más valioso siempre había sido compartir momentos tranquilos a su lado. De regreso a casa, Ine reconoció el árbol que plantaron cuando se casaron, aunque estaba maltratado, resistía y justo allí, entre ramas secas, descubrieron una brillante manzana dorada. Más tarde en casa, Shusu reflexionaba sobre lo duro que había sido todo, agradecido de haber tenido a Ine a su lado, pero al mirarse en el espejo casi se cae del susto. Ahora tenía la cara y el cuerpo de alguien de 20 años. Corrió a contárselo a Ine solo para descubrir que ella también había rejuvenecido. Sin dudarlo, le propuso irse de luna de miel. Al día siguiente, su nieta Mino llegó de visita y los encontró trabajando en el jardín. Al verlos tan cambiados, soltó su bolso del impacto. Poco después, mientras Shusu jugaba al golf en el parque, una mujer se desmayó al verlo. Fue entonces cuando aparece Kokichi, quien comenta que jamás había visto a su esposa con una expresión así. Matsunosuke también se suma a la escena haciendo bromas sobre la nueva cara de Shusou. Mientras tanto, Matsunosuke le ofrece té a Ine, pero al ver su nueva apariencia, queda tan nervioso que derrama el té sobre sí mismo. Cuando Ine va por una toalla, él no puede evitar admirar cómo se mueve. Unos días antes, Yoshaki, el hijo mayor de Shusou, intentó convencerlo de mudarse con él, pero Shusou se negó aferrado a su independencia. Por otro lado, Kaede, la nuera de Shusou, escuchó la conversación y comprendió que Ine estaba decidida a quedarse junto a él. Más adelante cae de visita a la casa y casi se desmaya al ver a Shusou rejuvenecido. Él se disculpa creyendo que ella ya lo sabía. Kaide, aún confundida, decide contarle a Yoshaki. Cuando Yoshaki regresa y los ve, intenta mantenerse firme, pero la escena lo supera. le reprocha a Kaede no haberle avisado antes, pero ella responde que quería que lo viera con sus propios ojos. Ine tocada por la nostalgia le acaricia la cabeza a su hijo recordando cómo era en su infancia. Luego Mino le pide una caricia también yu rodeado de chicas hermosas, bromea diciendo que pronto será el centro de los celos. Tiempo después se anuncia el festival deportivo Entre pueblos. La única escuela del lugar se había fusionado con otra, lo que desencadenó una competencia intensa. Los ancianos del pueblo comienzan a dudar de participar temiendo ser humillados, pero Matsunosuk aparece y le pide a Shou que los represente. Shu, desconcertado por su propia apariencia musculosa, cree que están bromeando. El día del festival, Heisuke, líder del otro pueblo, aparece junto a sus nietos burlándose de los ancianos rivales. Pero cuando ve a Shouo e Ine rejuvenecidos se queda helado. Cree que son los nietos, pero Shouo aclara con orgullo quién es. Llega la hora del tira y afloja. El equipo de Yuzu parece perder hasta que una anciana convence a Ine de animar con pompones. Su espíritu de porrista enciende a los veteranos que sacan fuerzas de donde no hay y logran vencer. Los rivales quedan boqui abiertos convencidos de que hasta los abuelos pueden caer por una animadora. Luego, en la carrera de tres piernas, los nietos de Heisuke llevan la delantera, pero cuando Shusou e Ine toman el relevo, pisan el suelo con determinación, alcanzando a los jóvenes sin vacilar. Tras perder varias competencias ante la pareja rejuvenecida, Heisuke y sus nietos organizaron un funeral culinario. Heisuke, frustrado, se queja de que Shou no solo le robó sus líneas, ahora también le robó las sonrisas de sus nietos. Aún así, los consuela diciéndoles que el próximo año podrán vengarse. En medio de eso, Ine se les acerca y se disculpa por haber desanimado a sus nietos. Heisu que bromea diciendo que debería estar con su esposo, pero Ine le responde que no puede. Shuzu está rodeado de mujeres que lo atiborran de comida, entonces saca la comida que preparó y les pregunta si les interesa. Al ver esos platillos únicos, los chicos no dudan. Mientras comparten la mesa, Ineles revela que años atrás le confesó sus sentimientos a Show. Les dice que si quieren revancha deben mejorar y volver el año siguiente. Una semana después, un joven llega gritando que tiene un paquete para la casa de Showou. Al tocar se encuentra con Mino y se pone nervioso. Le entrega el paquete de parte de Heisuke y Mino lo invita a pasar, ya que sus abuelos estaban de compras. El chico Shoutouta, incómodo frente a su crush, intenta mantener la compostura para romper el hielo. Saca su celular. Mino le pregunta qué juego está jugando, justo cuando Ine y Kaide regresan. Kaide se sobresalta, pero se calma al ver que no pasa nada raro. Mientras conversan, Shouta se pregunta si está en una reunión de padres y maestros. Cuando el ambiente se relaja, Mino explica porque cree que él sería una buena elección. Aunque él dice que exagera, Shuso, curioso les pregunta a las damas su opinión, pero solo obtiene risitas. Al despedirse, Mino le dice a su abuelo que le hubiera gustado pasar más tiempo a solas con Shoutouta, dejando a Shusou con una ceja levantada. Más tarde, mientras cenan, Shusou e Iné recuerdan cuando el padre de Shuzu intentó buscar la esposa. Aquello terminó en una pelea entre padre e hijo hasta que Invino y le dijo a la chica que se alejara. Ese hombre ya tenía dueña. Días después, en el huerto, unos chicos regresaban de la escuela fantaseando con trabajar en Tokio y enamorar chicas. Justo en ese momento, In saluda con una sonrisa tan radiante que salen corriendo preguntándose quién es esa mujer. Uno sospecha que debe ser la nieta del anciano, pero su ilusión se rompe cuando Shuo aparece en su camioneta y recoge a la supuesta nieta. Más tarde, Shusu oa el periódico mientras observa a su esposa que se levanta para preparar la cena. encuentra un paquete y al abrirlo descubre un vestido nuevo que Ine mira encantada. Esa noche, después de cenar en silencio ven una película romántica recomendada por Mino. Al ver una escena de beso, Shusu comenta que él e Ine se entienden incluso sin eso. Ine le pide que haga algo dulce, así que él la acorrala suavemente contra la pared como un galán. Pero ella le dice que puede esforzarse más porque tras más de 50 años esa pose impresiona. Shuzu retrocede y admite que quizá está tratando de imitar a los jóvenes. Y asa asciente. A veces jugar a ser adolescentes puede ser peligroso. Más tarde, Shi, la hija del segundo hijo de la pareja, llega a casa de sus abuelos. Dice que se quedará a pasar la noche. Recuerda que discutió con su padre y escapó hacia el único lugar que la hacía sentir segura. Pero al ver a su abuela tan joven se confunde aún más. Cuando Ine le ofrece comida, Shori la rechaza cruzada de brazos. Al rato la abuela se sienta a su lado y con paciencia le hace compañía hasta que Xori rompe en llanto. Confiesa que huyó porque sentía que no tenía nada. Ine la abraza y le asegura que eso no es verdad. Años atrás, cuando eran jóvenes, Ine se enfermó y arruinó los planes de vacaciones de Shu. Ella le pidió que llevara a Yoshiaki a la playa, pero él se negó. Dijo que sin ella el viaje no tenía sentido, aunque Ine siempre sospechó que lo que él realmente quería era verla en bikini. Al ver a Shusu dormido, pensó si él disfrutaría verla así, pero se desanimó por la vergüenza. prefirió usar el vestido que él le regaló. A Xori le sugiere ser más atrevida, recordándole que es linda y que a pesar que por dentro sea una anciana, eso solo le debe importar a su esposo, que ella la conoce demasiado bien. Ine sonríe incómoda y dice que lo pensará mientras prepara la cena. Al día siguiente anuncia que ella no necesita gafas de lectura. Mino, sorprendida, comenta que sus ojos también parecen rejuvenecidos. In entonces lee el calendario de la pared con total claridad, dejando a Mino asombrada. Para probar su vista, le pide que lea el periódico desde lejos y lo hace sin problema. Justo entonces entra Shusu curioso por el alboroto. Para demostrarlo, Mino le pide a Ine que lea lo que ella señale, pero Ine aprovecha para lanzarle indirectas coqueteándole. Mino al notarlo entra en pánico. Poco después Mino les pregunta si alguna vez tuvieron una cita o se tomaron de la mano. Ine dice que no, que las muestras públicas de afecto no eran lo suyo. Chusu agrega que las parejas mayores solo se abrazaban para caminar. Vino se queja de que no tienen nada de romántico. Días más tarde regresan de las compras. Mientras caminan, Chusu nota que Ine no lleva guante en una mano. Ine piensa que quizá él se dio cuenta, pero se convence de que solo la estaba probando. Mientras ella duda, Shuzu también se pregunta si debería tomarle la mano. Ine comenta que no está abrigado y aunque él dice que está bien, no entiende la indirecta. Ine suspira y decide simplemente disfrutar el paseo. Finalmente le toma la mano y siguen caminando hacia casa. Más adelante visitan la clínica donde su hijo Takajiro trabaja como médico. Al ver los jóvenes se sorprende. Tras saludarlos les pregunta si se sienten extraños, pero ellos aseguran que están bien. Takajiro decide hacerles un chequeo y promete enviar los resultados después. Al despedirse recuerda que la enfermedad de su madre lo motivó a volverse médico, aunque en ese momento no pudo hacer nada. Después, Ine y Shusou caminan por el huerto recordando como un huracán arrasó su manzano. Aún así, no se rindieron. Vendaron el árbol y lo cuidaron día y noche hasta que creció una manzana dorada y la compartieron. Esa noche Ine sueña con una explosión suspendida en el cielo. Algo la amenaza desde arriba y se despierta angustiada. Al contarlo, admite que soñó lo mismo. Justo entonces le recuerda que es su aniversario número 58. Ella le pregunta si quiere pastel, pero él responde que ya no están para eso. Aún así, se levanta para traer un plato especial, pero al abrir el refrigerador, descubre que Shusou ya lo había preparado. Ella lo enfrenta con una mirada fulminante, acusándolo de querer sorprenderla. Le pregunta si Mino estuvo involucrada, pero él insiste en que lo hizo solo por ella. Comen el pastel juntos. Luego Ine le regala a Shoo una consola de videojuegos. Él pregunta para qué sirve e Ine explica que ayuda a prevenir la demencia. Mientras juega, Shusu comenta que los juegos de antes eran mejores, voltear cartas o jugar a la mancha. Ine se ríe, pero le deja la consola. Luego prueban un juego de zombies y comentan cada cosa rara como si fueran turistas en el mundo digital. Aunque Ine pensaba que serían demasiado mayores para eso. Pronto ambos cazan zombies como expertos, mientras Xori los observa desde el sofá. Al día siguiente, cuando Xori los visita, se entera de que ya ganaron todos los trofeos del juego. Se queda sin palabras. Poco después llega Mino y ve a Shori con el celular. Emocionada, salta sobre ella, pero Shori le pide que no sea tan pegajosa. Mino insiste en que hace mucho que no se veían, pero Xori dice que igual le molesta. Mino le pregunta si quiere a sus abuelos, ya que vive con ellos. Xori responde que no es como si le gustaran tanto. Justo entonces entra Shou y escucha todo. Mino se disculpa, pero él queda congelado. Mino le pide a Shori que lo desmienta. Ella lo abraza y le suplica que no la odie, admitiendo que lo dijo sin pensar. Esa noche, Shusu sueña con su yo antiguo atrapado en un lugar oscuro, como si el tiempo colgara de un reloj de arena. No deja de preguntarse por qué él e Ine tienen los mismos sueños desde que rejuvenecieron. De pronto, el tiempo se retuerce en su mente y cae en una extraña conciencia. Al despertar, le cuenta a Ine que volvió a ser viejo. Asombrado le lanza una broma preguntándole si prefiere a los jóvenes, pero ella lo sujeta por los hombros y le responde firme, que cuanto más madura es la fruta, más dulce su sabor. Al día siguiente vuelven a la clínica. Takajiro leu a Shusou que no debería excederse. Más tarde, mientras conversan, Takajiro le dice que sus resultados muestran un cuerpo incluso más saludable que antes de rejuvenecer. Tiene la vitalidad de alguien de 20 años. Esa noticia deja a Ine intranquila. Si él vive mucho más que los demás, podría quedarse solo. Más adelante, los hijos de Shoso lo visitan y se sorprenden al verlo otra vez envejecido. Él les explica que aunque parezca mayor, aún tiene energía. Para probarlo, organizan una lucha de brazos. Yoshiyaki le pide que no se exceda y promete reservar una habitación con baño al aire libre para su próximo viaje. Shusu ya se imagina el baño y entra al reto con intensidad. Derrota a Yoshiaki sin esfuerzo. En una tienda del centro, varias mujeres los observan. Shusu se siente incómodo pensando que no parecen pareja. Se aleja un poco e Ine lo nota cuando le pregunta por qué. Él admite que sintió que la gente los miraba. Sugiere fingir que no están casados. Justo entonces un empleado se les acerca y le pregunta si busca algo para su nieta. Chu se siente avergonzado, Ine lo interrumpe y afirma con firmeza que es su esposa. Camino a casa, Ine dice que entiende su mentira, pero ella no quiere ser otra cosa que su esposa. Shuzu se disculpa. Desde que rejuvenecieron, Ine ha comido mucho de su bocadillo favorito, pero tras ver a Shouo en su forma mayor se contuvo por temor a afectarlo. Él lo nota. Ella dice que no tiene hambre y que lo comerá luego. Esa noche, cuando Shou duerme, Ine abre los bocadillos. Al dar el primer bocado, él aparece a su lado, ella se asusta y confiesa que no quería ocultarlo. Él sonríe, toma uno, se lo ofrece y le dice que le encanta verla comer así. Se sientan juntos a disfrutar. Años atrás, cuando Ine perdió a sus padres y su hogar, fue enviada a vivir con parientes maternos que despreciaban a su padre rico. La ignoraban y ella halló refugio en un templo. Un día, Shusu se le acercó y le ofreció pasteles de arroz. Ella los rechazó, no acostumbrada aún al sabor local. Cuando reveló su identidad para alejarlo, él insistió. No le importaba eso, solo quería que comiera. Antes de irse, le deseó suerte. Con el tiempo, Inés se preguntaba por qué ese chico seguía buscándola. Al preguntárselo, él respondió con otra pregunta por qué se sentaba allí. Ella dijo que prefería ese lugar. Sin darse cuenta, él se sentó junto a ella. Ella lo miró de reojo, temiendo que los malinterpretaran, pero pensó cuánto costaría abrirle su corazón y en ese instante decidió hacerlo. De regreso al presente, Ine se da cuenta de que Shou la conquistó por completo. Esa noche él vuelve a soñar con el misterioso cristal. Trata de entenderlo. Observa la arena cayendo dentro. Lo gira esperando sorprender a Ine a la mañana siguiente, mientras se cepilla los dientes con su nuevo aspecto, Ine le dice que arregle la cabecera de la cama. Él queda desconcertado. Luego le pregunta si cree que seguirán jóvenes para siempre. Ella lo mira seria. Él responde que no porque la arena sigue cayendo, pero aún les queda tiempo. Le toma las manos y sonríe. Tiempo después, Kaisuke regaña a Shoutout por llevar a Shouu a limpiar el viejo almacén. Mientras empacan, Shuta pregunta si van a tirar todo. Keisuke dice que sí, solo sería una carga para su nieto. Shuta señala una caja negra. Al verla, Keisuke se detiene afectado. Shouta le pregunta a Shouo qué podría ser. Cree que pertenecía a la esposa de Heisuke. Este pide quedarse solo. Afuera, Shuzu le pregunta, ¿qué hará con el almacén? Heisuke dice que planea demolerlo. Sus hijos no continuaron la granja y ya no hay artesanos. Decide llamar a un amigo para eso. Mientras tanto, Shoutouta y Shusou conversan. Chusu le pregunta si ha pensado en quedarse. Shoutouta responde que quiere mudarse a Tokio para convertirse en futbolista profesional. Shuzu lo elogia. Shoutouta agrega que algún día revivirá la granja de su abuelo. Al escucharlo, Heisuke corta la llamada de demolición y se seca las lágrimas. Shusu lo felicita por tener un nieto así. Heisuke, avergonzado, se queja por llorar frente a su rival. En la escuela, unas chicas comentan sobre la extraña pareja de cabello plateado que ronda por la ciudad. Al irse una le pregunta a Mino si sabe algo. Ella dice que no y se excusa. Sus amigas la miran con sospecha. Más tarde, en un restaurante, Mino le pregunta a Shota si quería una relación como la de sus abuelos. Él dice que sí, que es un ideal admirable. Mino asiente sonriente. Cuando Shoutouta se levanta para ir al baño, ella lo mira pensando cuánto desearía que Shouo fuera su nieto real. En el baño, Shouta se mira al espejo, recordándose que solo está estudiando con Mino, sin intenciones ocultas. Más tarde, Mino cuenta en casa que su clase tendrá un café en el festival cultural. Ine está emocionada, podrá pasar ese día junto a él. Llega el festival yuso e Ine pasean recordando sus años escolares. Ine sonríe como una niña yu nota su felicidad. Entre la multitud, una chica tropieza y le derrama jugo. Tras disculparse, la lleva al club escolar. Las chicas la visten con uniforme y la admiran. Shosu espera afuera recordando cuánto atraía Ine en su juventud. Una chica lo llama para que entre y al verla con el uniforme queda impactado. Ella lo mira coqueta y le dice que hace tiempo que no la veía así. En el café de la clase de Mino, la pareja toma té. Shzu elogia la decoración. La profesora bromea diciendo que pensaba que él era el novio de Mino. Él ríe y agradece el cuidado hacia su nieta. Luego comenta que hay pocos clientes. Shouta explica que la clase vecina montó un ramen auténtico con ayuda de sus padres. Shuzu protesta que eso no es justo. Los estudiantes deberían ser el centro. Shuta dice que aún atraen chicos gracias a Mino, pero le faltan chicas. Mino mirando a Shusou le pregunta si conoce a alguien que atraiga clientas y dice que le encantaría tener a alguien como él recibiéndola. En ese instante, Shuzu comprende que ha sido nombrado camarero estrella. Pronto, la clase dos se llena de mujeres, mientras los del puesto de ramen observan desconcertados. Cuando algunas clientas salen, comentan lo encantador que es Shzoo, que las trata como verdaderas damas. Dentro del salón sírvete con elegancia juvenil. Desde la puerta los rivales del ramen se quejan. Afuera, Shuta espera reunir valor para invitar a Mino a la hoguera, pero al verla con Ine duda. Justo ella le pregunta si ir al evento. Mino responde que le gustaría, pero no tiene con quién bailar. Entonces Shuou lo sorprende espiando. Le pregunta si pasa algo. Shoutouta se pone nervioso, pero Shuzu lo ha entendido todo. Entra, toma a Ine del brazo y dice que ya es hora de irse. Ella protesta, quería ver la hoguera, pero él la arrastra dulcemente lanzando a Shouta un pulgar arriba. Shoutout lo toma como señal y se acerca a Mino. Esa noche, junto al fuego, Ine se lamenta por perdérselo. Shouu, mientras la acompaña a casa, le dice que a veces hay que dejar espacio a los jóvenes. Esa noche, Ine vuelve a soñar con el cristal y trata de girarlo como hizo Shou tropieza, se golpea la cabeza y rompe parte del vidrio. A la mañana siguiente, Shuzu la ve frente al televisor con el cabello negro. Ella confundida observa el calendario. Muestra una era imperial que no reconoce. Shusu sospecha que Ine ha perdido la memoria volviendo mentalmente a suyo joven. Ella no recuerda nada, pero al mirar su anillo empieza a aceptar su versión. Entonces le pregunta por qué pasó más de medio siglo con ella. Él intenta responder pero ella lo interrumpe. Quiere que la haga enamorarse otra vez. En la cocina ine mira la olla arrocera como si fuera un artefacto alienígena. Shusu le explica cómo funciona. Prueba el arroz y queda asombrada por el sabor. Mientras lavan platos lo observa sorprendida. No está acostumbrada a ver a un hombre haciendo tareas domésticas. Él dice que no sabe cocinar, pero ayuda en todo lo demás. Ine lo felicita, pero él minimiza el elogio, recordando que ella también trabaja en el huerto. Más tarde, mientras hacen la cama, Ine pregunta por el cristal. Shuzu le dice que si duerme bien, lo entenderá. Al día siguiente, Shouu despierta rejuvenecido y radiante. Chusu le pregunta si soñó con el reloj de arena, pero ella responde que no, que solo quería asegurarse de que él fuera realmente él. Él le pregunta si recuerda algo de su yo joven. Ella dice que no. Chusu se da vuelta decepcionado. Después revisan álbumes de fotos. Al ver a la familia de Yoshki, Ine comenta que sería un shock si supieran que perdió la memoria. Justo entonces, Mino anuncia que Yoshaki y su familia han llegado. Shuzu entra en pánico sin tiempo. Le pide a Ine que finja ser la abuela por un día. Ella acepta, pero le advierte que no recuerda a su hijo ni a su nieta. Al recibirlos, Yoshaki le pregunta cómo se siente. Shuzu dice que muy bien e Ine lo repite, pero Yoshaki nota algo raro en su acento. Shuzu improvisa diciendo que desde que se puso el uniforme escolar a veces le vuelve el acento antiguo. Luego en la cocina Ine agarra los ingredientes y pregunta si puede hacer arroz al curri. Shuzu asiente. Ella toma el cuchillo y empieza a cortar como samurá. Él la observa paralizado. Le pregunta si ha olvidado cocinar. Ella admite que perdió técnica, pero aún recuerda cómo cortar y eso le basta. Después Ine le pregunta si él sabe cocinar. Chusu responde que hacer arroz al curry no es problema. Ella le pide que le enseñe a cortar. Él la guía desde atrás mientras cocinan. Más tarde, Mino prueba un poco y comenta que las papas están grandes. Yousu que solo se lo imagina. Yoshaki se queja de lo exigente que es su trabajo. Shuzu sugiere que podría unirse al huerto si empeora, pero él se niega. Insiste en que no quiere hacer una carga y ahí su madre le toma la mano y le dice que no necesita exigirse tanto, que sus superiores solo se aprovechan. Yoshaki, sorprendido, guarda silencio. Esa noche, mientras Shuzo hace la cama, Yoshaki le pregunta si In realmente su madre, ya no se comporta igual. Al día siguiente visitan el Jinja. Ine le propone matrimonio y sugiere recrear el momento para recuperar recuerdos. Sentados, le toma las manos, pero no siente nada. Frustrada dice que quizás nunca ocurrió. Vuelven a casa en silencio. Al día siguiente visitan un hospital. Ine ve a su hermana. Recuerda como la buscó con ilusión, pero ella solo recordaba a su madre. Ine se sintió sola. Más tarde le pregunta a Shou por qué siempre está con ella y lo agarra de la camisa. Después escuchan a su hermana tocar el piano y cantar una melodía de la infancia. Ine llora. Shuo y la cuidadora también. Esa noche Ine cena sola. Reflexiona sobre como Shoo no ha hecho avances románticos, pero lo extraña cuando no está. Recuerda su promesa de nunca dejarla. El cristal se repara y ne recupera la memoria. Shusu llega. Ella corre a abrazarlo llorando. Días después, mientras planean un viaje a Itami, Y sugiere pasar por Tokio. Se emociona al pensar en el tren cama, pero Shouta recuerda que ya no existe. Frente a Mino, él pregunta si está bien que los abuelos le consulten. Mino dice que no le molesta, ya ha estado en Tokyo con su equipo. Se preguntan si conocen a alguien allí. Shuzu dice que su hija vive en Tokyo, pero estará ocupada. Todos miran a Shota, él pregunta si es broma. Mino dice que quiere ir también y bromea con que será una luna de miel con los nietos. Shoutout protesta, pero Shouu le susurra que será una cita con Mino. Luego Shuta y Shouu visitan a Heisuke. Este se enfurece, pero Mino se adelanta y se presenta como compañera de clase. Al preguntar quién es, Shu aclara que es su nieta. Heisuke entra en pánico y le pide a Mino que cuide bien a su nieto. Shoutout intenta aclarar que no es lo que parece. Días después, Ine llama a Shosou para avisarle que ya llegaron. Mientras tanto, Yoshiaki se despide de los chicos y les desea que se diviertan. Antes de partir, Shoutout agradece, pero Yoshaki le lanza una advertencia. Si algo le pasa a Mino, lo lamentará. En el tren, Ine comenta que Shuso nunca fue a Tokio por salud, lo ayuda a subir. Justo entonces, Mino y Shoutouta aparecen en pantalla avisando que están en el tren equivocado. Corrigen a tiempo y embarcan al correcto. Durante el viaje, Yusu mira por la ventana emocionado. Cuando se acercan a Tokio, Ine sugiere dormir. Se cubren el rostro con antifas. Mino los ve dormidos y dice que es una pena. Luego despiertan rejuvenecidos. Shoutouta se asusta al verlos. Más tarde, Mino propone visitar a su tía Akemi mientras Shoutouta irá a ver a su abuela materna. En la casa de Akemi ella cree estar alucinando. Cuando Ine la saluda, se asusta. Hablan de los hijos y Akemi dice que están adorables. Llega Kouuke, el hijo de Akemi. Shosou va a recibirlo, pero el niño se asusta. Al ver a su abuelo joven, al día siguiente, Mino y Shoutouta exploran Tokio. Se asombran por los edificios. Shusu e Ine también pasean. Ella se maravilla del mercado y comenta que parece hecho para mayores. Luego se separan. Shuso entra a una tienda, un empleado le pregunta si busca un regalo para su abuelo. Él dice que es para su esposo, lo deja perplejo. Al salir, Ine ve un grupo reunido. Shusu móde la ropa frente a un grupo de ancianas encantadas por sus poses. Luego visitan un restaurante. Shuzu menciona que quiere probar un parfe. Al servirlo, las damas se iluminan. Mino insiste en comer solo lo suyo y se aferra a su plato. Ine le pregunta a Shusu si estaba rico, pero él está maravillado. Después van a un centro de juegos, entran a un fotomatón, Mino toma fotos con Showa y les muestra a sus abuelos cómo hacerlo. Chusu e Ine posan como adolescentes y escriben mensajes. Al ver lo bien que quedaron, deciden tomarse una foto grupal. Ya en casa, Ine le da a Kousuke unas ofrendas, se emociona, pero al revisarlas hace un berrinche. No son las que quiere. Entonces Shunsuke, el hijo menor de Akemi, saca los modelos correctos. Sho, curioso, dice que nunca ha visto trompos así. Lo reta. Si gana, le comprará cualquier juguete. Kuzuke acepta, empieza la batalla. El trompo de Shusou gana. Kusuke llora y N lo regaña por no dejarlo ganar. Pero Shou cumple su promesa y compra el juguete alegrando al niño. Al día siguiente, un hombre se acerca a Shusou e Ine con una tarjeta. Recuerdan la advertencia de Shoutouta y lo rechazan. Shusou se indigna y defiende la belleza de su esposa. El hombre sugiere que Ine sería ideal para una portada. Ella estalla, grita que su esposo es guapo y exige que los dejen en paz. Más tarde, Yusu le cuenta a Shouta que solo les dijeron que tenían más de 80 años y el tipo desapareció. Días después, Mino anuncia que han llegado a Itami. Ine llora de emoción y agradece a todos. Mino graba el momento. En la posada el encargado los recibe cordialmente. Shuta comenta que debe costar una fortuna e Ine le dice a Shusu que su habitación tiene baño al aire libre, sin embargo, deben compartirla. Shuzu Pícaro le pregunta si quiere bañarse juntos. Ella acepta sonrojada. Mino se va feliz a bañarse. La pareja planea su cita privada. Durante la cena todos quedan asombrados y Ne llora de felicidad por lo deliciosa que está la comida. Shosu se une. Ella abre vino, sirve una copa y él se disculpa con su hígado. Mino nota a Shoutouta pensativo. Él se culpa por arruinar la noche romántica de sus abuelos, pero Mino le dice que sin él nada habría sido posible. Esa noche Mino le desea buenas noches a Shota, que se pone nervioso. En la otra habitación Shou ronca fuerte Inserva como un maniquí embrujado. Al escucharlo hablar dormido, piensa que no habrá acción esa anoche. En sueños, Chusu está en el baño con Ine atrapando burbujas, pero despierta dando vuelta al reloj de nuevo en sus sueños. A la mañana siguiente, Ine lo despierta para el baño de sal. Él balbucea algo de burbujas que disparan misiles. En la playa, Ineca para miradas, Shuzu aparece y todos se asombran de su físico. Reta a Shouta a una carrera en el mar. Shouta intenta negarse, pero Shusu lo desafía. Si pierde contra un viejo, olvídese de su nieta. Mino le pregunta a Ine por qué no nada. Ella dice que prefiere recoger conchas. Mino nota que ya no parece una simple abuela. Desde la orilla alguien grita. La carrera ha comenzado. Shoutouta termina exhausto. Shusu muestra orgulloso sus músculos. Luego juegan a la pelota. Ine yu descansan bajo una sombrilla. Él se queja de que Ine compró traje de baño para no usarlo. Ella dice que prefiere la sombra. Tiene más de 80 años. Shuzu mira a los chicos coqueteando en el agua y dice que también quiere presumir de su novia. Ine le dice que estar con ellos le basta. Él insiste en verla con traje, pero ella dice que ya la ha visto mil veces. Él responde que ahora es diferente y no quiere que otros hombres la vean. Shoutout se acerca a Mino. Más tarde juegan ping pong y por la noche Ine y Sho se bañan juntos. Él pregunta si está bien en su forma mayor. Ella responde que no le molesta. Ríen juntos recordando cómo serían de viejos y de jóvenes. Al día siguiente visitan un templo. Chusu observa las tablillas de deseos y dice que va al baño. Mino y Shoutouta se unen. Ella le pregunta qué escribió. Él dice que sueña con jugar en el torneo nacional. Mino le muestra su deseo sacar buenas calificaciones, pero también desea volver a visitar Itami con alguien especial. Ine mira la tablilla de Shusou y al voltearla se conmueve. Él deseo volver a ser su esposo en la próxima vida. Luego visitan un árbol milenario que alarga la vida. Shusou e Ine deciden darle 100 vueltas. Shuta también pide un deseo que Mino quiera caminar con él como alguien especial. Están por darse de las manos. Shusu e Ine los observan esperanzados, pero Shoutouta se acobarda más tarde. Intenta preguntarle a Mino por sus sueños, pero se queda dormido. Mino, en silencio se da cuenta de que nunca pensó en los suyos. Siente celos de Shouta, se acerca y le da un beso en la frente. Años atrás, Shou recordaba a su padre que dejó deudas y lo obligó a vender parte del huerto. Aún así, prometió llevar a Ine de viaje y cumplió. En el tren de regreso, Ine cubre su mano dormida con una manta. De regreso en casa, los reciben con alegría. Tiempo después, en la biblioteca, Satoshi busca su tarjeta perdida. Xiori se la devuelve. Nota que él sostiene libros sobre rejuvenecimiento. Satoshi, estudiante de medicina, le pregunta si se prepara para exámenes. Le explica que investiga a los ancianos que rejuvenecen porque fue criado por sus abuelos, quienes lo salvaron muchas veces. Él le pregunta por qué quiere ser doctora y ella le dice que para devolverle la mano a sus abuelos. Más tarde, Yoshiaki se preocupa por la actitud de Mino y comenta a Shusou que cree que le oculta algo. In responde que solo está madurando, pero Yoshi Yaki teme que se junte con gente equivocada. Imagina a su hija en situaciones peligrosas hasta que Ine lo frena recordándole lo travieso que él era a esa edad. Días después, en el huerto, unos estudiantes se acercan a Showo preguntando por los ancianos. Él explica que están descansando y que él y su esposa como parientes cuidan el lugar. Al irse desea que no pierdan la esperanza. Esa noche Yusu sueña con el reloj de arena. Al día siguiente, los chicos se preguntan si volverán a verlos. Justo entonces, el shuzu mayor aparece y sus rostros se iluminan. Más tarde, Mino nota en el tren que olvidó su vento. Su amiga sugiere comprar uno, pero Mino dice que es especial. Lo hizo su abuela, quien de la nada aparece en bicicleta con su almuerzo. Mientras tanto, Satoshi da clases a Shiori. Ella se pregunta por qué sabe tanto sobre ella, hasta recordar que Mino la molestaba sobre sus gustos. Él le pregunta si está bien y ella responde preguntando por qué investiga el rejuvenecimiento. Él muestra su celular y revela que sus abuelos rejuvenecieron dejándola en shock. Hay Setsu cuentan que hallaron una manzana dorada y tras comerla rejuvenecieron. Shori pregunta si son los abuelos de Satoshi. Él aclara que solo son amigos. Luego dice que esperaba mayor sorpresa, pero que están bien y le piden que no se preocupe. Satoshi explica que desde el divorcio de sus padres ellos han sido como sus padres. quiere devolverles todo. Mientras Shori lo admira, los abuelos se disculpan por aburrirla. Ella responde que quiere que conozcan a alguien, luego presenta a sus propios abuelos. La reunión es cálida, los hombres comparten vino y las mujeres se felicitan. Chiori comenta que quisiera una relación como la de sus abuelos. Satoshi se sonroja y ella se da cuenta de lo que dijo. En otro momento, Setsu recuerda como Hayime la salvó de unos ebrios. Ine al oírla responde que su esposo es insuperable. Ambas discuten cuál es el mejor. Llaman a Matsunasu como árbitro. Él llega al gimnasio y encuentra una competencia de tira y afloja entre esposos. Ambos se esfuerzan por impresionar a sus esposas. Shusu logra avanzar y su esposa celebra, pero Matsunasu hace sonar su silvato. Dice que hubo trampa. Luego hacen una prueba culinaria. Los esposos prueban los platos y no distinguen cuál es cuál. Shusu dice que ambos los hizo Ine. Ella se regocija. Después las esposas discuten cómo decidir quién tiene al esposo más inteligente. Matsunu, confundido les dice que no hay ganadores cuando se comparan dos amores. Agrega que no le importa ser el peor mientras su esposa sea feliz. Ella escucha y se derrite. Para celebrar organizan un picnic hasta la noche. Tiempo después, Shori le pide a Ine que le enseñe a cocinar. Al ver las recetas, Shori se queja de que suenan a comida de abuelos. Ya cocinando, Ine le pregunta por qué quiere aprender. Shori confiesa que pasa mucho tiempo en la biblioteca y quiere preparar su propio evento. Ine menciona que a Satoshi no le gustan los fritos y Xori dice que no le importa. Más tarde, mientras Satoshi almuerza, Xori comenta que la comida está buena. Él pregunta si la preparó ella, pero dice que eran sobras. Luego, Shou e Ine ven una película de terror. Él elogia los efectos, ella cubre la pantalla y hace un ritual. Al preguntarle si tiene miedo dice que no, aunque su reacción lo contradice. Esa noche, mientras él duerme profundamente, Ine se acuesta en sus brazos como un zombi. Al día siguiente, él se queja de que su brazo se le durmió, pero ella dice que lo imaginó. Más tarde, observan un retoño de manzano regalado por Haime. Mi no se interesa. Shuzu explica que criar uno toma años. Ella dice que quiere aprender, aunque no esté decidida aún. Explica que no quiere sentirse inútil si la persona que admira decide seguir su camino sola. Luego llama a Shoutouta y le pregunta si estará libre al día siguiente. Él acepta. Al día siguiente, Mino y Shoutout plantan el retoño. Ella agradece su ayuda y dice que ese árbol vivirá cuando sean mayores. Él dice que quizás esté casada y lejos, pero ella responde que lo esperará. Mientras se alejan, Shusu e Aine los observan entre risas. Años atrás, Ine preguntó si harían un festival de verano. Shosu dijo que consultaría con la Asociación de Vecinos. De vuelta al presente, Mino se viste con un yucata tradicional y le pregunta a Ine si usará uno. Ella dice que no, pero Mino le consigue uno y al verla vestida, Shouo queda sin palabras. Llega el festival, los ancianos beben con entusiasmo mientras Cine disfruta un algodón de azúcar sola. Cree que pasará la noche así hasta que Shusu aparece tambaleando feliz. Mientras caminan, algunos hombres lo critican por dejar sola a su mujer, pero Ine no le da importancia. Al ver a unas mujeres comiendo fresas confitadas, él le pregunta si quiere una. Ella dice que caminar con él ya la hace feliz, pero él insiste y finalmente la convence. Luego Ine prueba suerte en un juego de tiro para ganar un oso, pero falla. El encargado le desea suerte para la próxima. Shusu toma el arma, sonríe y juntos disparan, derriban el oso y ya de camino a casa, Ine lo elogia por su puntería mientras otras señoras admiran el peluche. Esa noche Ine recuerda su sueño oscuro. Una voz le anunciaba cuántos días le quedaban. Shusu nota su palidez, le pregunta si también escuchó algo. Ella asiente. Solo le quedan 7 días. Shuzu la abraza sabiendo que lo presentía. Desa un milagro y entra en trance. Se encuentra frente a una balanza gigante. Una voz le habla. Estachigami, Dios del templo, como recompensa por limpiar el lugar, le ofrece cumplir un deseo. Shosu pide más vida para Ine. El dios no puede crear vida, pero sí transferir parte de la suya. Chusu acepta el trato y despierta. Ine le pregunta cuánto tiempo durmió. Solo 15 minutos. Él dice que soñó que su reloj se llenaba de nuevo. Deciden no hablar más del tema y disfrutar lo que les quede. Más tarde, Satoshi cuenta la historia de una pareja que salvó su aldea con agua sagrada. Ine, aburrida, se aleja pensando en la fuerza de sus abuelos. Satoshi la sigue y la soborna con plátanos con chocolate. Días después, Mino les explica que es Halloween. Shuzu comenta que parece un evento infantil, pero Mino le dice que los adultos también se disfrazan. El día llega y los abuelos los reciben disfrazados como criaturas de Stranger Things. Shoutouta queda tan impactado que se desploma. Unos días después unos hombres recorren el huerto buscando el camión demoníaco. Uno lanza una colilla encendida. Ine le pregunta a Shou por no duerme en casa. Él patrulla para proteger el huerto. Justo entonces su camión aparece. Los hombres intentan huir, pero él acelera como si fuera Vin Diesésel y los alcanza. Recuerda cuando el mecánico modificó su motor. El camión serpentea la curva y los deja atrás. Los intrusos prometen no volver llorando por las noticias. Matsunasu anuncia entrenamiento con pistolas de aire, pero las ancianas le piden a Shou que las entrene. Pronto forman una brigada armada, Matsunazu queda atónito. Días después, Mino y Shoutouta se refugian de la lluvia en el templo. Ella le agradece su amabilidad. De pronto, un rayo cae cerca. Tratan de llamar, pero no hay señal. Aparece una imagen como un holograma. Showu joven cubre a Ine con su chaqueta. descubren que es un recuerdo. Él le promete que si su padre no aprueba su relación, tomará la fruta prohibida para que los acepten. Mino y Shoutouta, impactados, vuelven empapados y Neles da ropa seca. Ella dice que empezó a visitar el templo después de conocer a Showou. Más tarde, Mino se apoya en el hombro de Shota, agradeciéndole por protegerla. De pronto siente una presencia. Shouu e Ine los estaban espiando, pero son descubiertos. Intentan justificarse. Luego Ine viaja sola en tren. El conductor dice que es la única pasajera. Al día siguiente, dos ancianas se suman, le dicen al conductor que fueron invitadas a una reunión. Ine aparece y afirma que el pueblo aún necesita ese tren. Más adelante, Shosu conduce en la nieve al ver que el autoguía no avanza, toma la delantera y lidera hasta la ciudad. El conductor tímido le agradece emocionado. De regreso, de regreso, Ine está trabajando cuando en esos show la ve sin suéter toda sudada dejándolo a máxima temperatura. Poco antes de Año Nuevo, Yoshiaki y Caede llegan para ayudar con los preparativos. Mientras cocinan, Kaed le recuerda a su esposo que ya no es joven. Yosaki se niega a rendirse, pero Shuzu le dice que admita que no quiere verse mal delante de su esposa. Finalmente se el mazo y le pide a Shusou que le ayude. Ambos trabajan juntos mientras cae de los observa divertida. Mino, por su parte, se maravilla con un enorme muñeco de nieve hecho por Shuso. Él comienza a construir otro explicándole que se prepara para recibir a los nietos. Pronto termina un dragón de nieve y cuando Mino le muestra a quién le gusta a Kusuke, Shusu lo recrea. Cuando la familia de Akemi llega se sorprenden al ver el dragón favorito de Kusuke y todos elogian el esfuerzo. Más tarde, Kusuke juega a las cartas con Shori y la vence. Cuando se une la abuela, ella le pregunta si tiene frío. Ella se sienta con ellos recordando los juegos de su infancia y sorprendentemente gana dejando a Kuzuke atónito. Llega la comida de Año Nuevo. Después de comer, Kuzuke le ofrece a Sho un masaje en el hombro. Luego, Shusu le da a Shori un sobre con dinero y cuando Kuzuke pide el suyo, le entrega una tarjeta para comprar libros. Kusuke se enfurruña decepcionado. Esa noche, mientras los niños juegan, los hombres comparten saque y las mujeres conversan sobre la crianza. Esta mujer cuenta que en el hospital hay un paciente que le habla como si supiera más que ella y le pregunta a Ine cómo soportarlo. Ine le aconseja ser abierta y segura. Cae de rompe en llanto agradecida por sus palabras. En ese momento, Shusu entra buscando un abridor de botellas, pero se encuentra a las damas en un abrazo grupal. Días después llega un paquete con tarjetas de Año Nuevo. Al abrirlo se queja de que solo queda Tarareo, su versión de red social. Recuerdan entre risas como antes recibían muchas más tarjetas. Tras las celebraciones todos se despiden. Kausuke, sin embargo, se aferra a Shuso y no quiere irse con Akemi. Ningún intento por convencerlo funciona, así que Ine le entrega un oso de peluche y le dice que lo vigilarán a través de él. Kuzuke toma el oso y entre lágrimas promete no llorar. Después de que todos se marchan, Ine le recuerda a Shouu que han vuelto a su vida tranquila y solitaria. Al oírlo, Shusou no puede evitar llorar Ine lo consuela en silencio. A la mañana siguiente, durante el desayuno, Ine le menciona que Mino y Shoutouta irán al huerto ese día. Al escucharlo, Shouu come con prisa. Más tarde se reúnen todos en el huerto y comienzan a trabajar con los árboles. Tras una jornada de poda, Shouu elogia a Shouta por su rapidez, pero él responde que aún le falta mucho por aprender. Shoutout pregunta si él poda todos los árboles y Shou comenta que tiene unos 200. Luego Shusu le pregunta cómo va con Mino. Shoutouta dice que bien, pero Shu bromea con que Heisuke no dejará de insistir sobre una boda. Shoutouta responde que aún es pronto para eso. Cerca de allí, Mino trabaja bajo la mirada de Ine, quien le pregunta si realmente le gusta estar en el huerto. Mino sonríe y dice que le encanta. Sobre todo porque quiere cuidar el manzano que plantó. Ine con picardía la acusa de solo querer pasar más tiempo con Shoutouta, pero Mino lo niega. En ese instante Shoutouta la llama por su nombre, pero ella lo regaña en voz baja por hacerlo delante de sus abuelos. Shosu notando todo, les deja el resto del trabajo y les dice que los llamen si necesitan ayuda. Durante el paseo, Ine señala lo hermosa que se ve la montaña. Inspirado, Shusu propone hacer algo alborotado, pero al final terminan descansando bajo un árbol. Allí conversan sobre sus hijos y nietos, preguntándose si estarán bien sin ellos. Recuerdan también los fuegos artificiales del verano, las comidas en familia y los deseos que alguna vez pidieron. Cuando Ine le pregunta qué desearía ahora, Shouu responde que todos sus deseos ya se cumplieron. Cierra los ojos y en su interior la arena de su reloj se agota lentamente. Mino y Shoutouta llegan con el almuerzo y los encuentran bajo el árbol en silencio. 50 años después, Shoutouta corre por el mismo huerto llamando a Mino. Cuando la encuentra, le muestra el árbol que plantaron juntos. Ahora es enorme, fuerte y en su cima cuelga una única manzana dorada, confirmando que la historia podría repetirse nuevamente.
#resumendeanime #animeresumen #resumen
Mis Redes:
➤Instagram: https://www.instagram.com/pipelao_oficial/
➤TikTok: https://www.tiktok.com/@pipelao_yt
NEGOCIOS: pipelaoresumenes@gmail.com
Titulo: Spy Music /Autor: Víctor Bou (Snail Music) /snailmusice
 
						
			
25 Comments
Me merezco un corazón
Muchas gracias por habernos dado un bonito este un buen resumen en está en esta bonita tarde muchas gracias mi pelo por darnos este anime de resumen y buenas y buenas tardes❤❤❤❤❤❤😂😂
Xd
Saludos y FELIZ TARDE Pipelao e igualmente para todos 🌟🌟🌟🌟😊😊😊😊😊😊 espero que hayan tenido una gran mañana 🤩🤩🤩🤩🤩🤩🤩
Primer
Me encantas me encantas tiene este anime ya lo había escuchado pero nunca me atreví a verlo😂😂😂😂😢😢😢😢😅❤❤
Primero, me encanta tu contenido brother, sigue así
Ey ey esa miniatura que parece anime NT
El nombre del anime es "Jii-san Baa-san Wakagaeru"
activo ahora como se llama el anime
Pfff buenísimo
❤😂😅
Ese anime me hizo reflexionar y apreciar mas a mis abuelos ❤
1ro que nada Pipelao te estamos muy AGRADECIDOS 🤩🤩🤩🤩🤩🤩 por habernos traído este magnífico anime 🤩🤩🤩🤩🤩 ya que es uno de los mejores que he visto 🌟🌟🌟🌟🌟🌟🌟
Muchísimas GRACIAS por habernos traído este magnífico resumen ya que fue DEMASIADO HERMOSO ❤️❤️❤️❤️❤️❤️,😂😂😂😂😂y conmovedor 😭😭😭😭😭, definitivamente los abuelos fueron una gran pareja de principio a fin 💛💛💛💛💛💛💛💛
Por último te doy las GRACIAS por haberme hecho 😭😭😭😭😭😭😭😭😭 de lo Bellísimo que fue este anime, sobre todo el final el cual también me hizo 😭😭😭😭😭😭😭😭😭😭
Bro y esa miniatura? ☠️
😐😑😑😑😑😑😑🖕🖕👎👎👎👎👎
Aaaaaperdon ✋️✋️😁😁😁
ME SORPRENDIO ESA PORTADA DEL VIDEO jajjj, gracias pipe por traer este anime ❤❤❤🎉🎉😊
Está bueno el animé gracias recomendado y muy entretenido me gustó mucho agradecerte por traernos esté hermoso anime sinceramente fue extraordinario lo he visto el final me hizo llorar 😭❤❤❤❤❤❤❤❤
Cuando vi la portada pense que era de un viejo acosador xd.jaajjajajaj
pasa name broo
9:31 Frame de latigazo
Tengo tiempo sin venir cuando cambiaron la voz